El Porsche 911 GT3 R Hybrid se presenta como un nuevo híbrido y además destinado exclusivamente para la competición. Y esto lo resaltamos por que no existe mejor forma de verificar el rendimiento y la fiabilidad del sistema masss que en una carrera. El super-auto de competición se presentará en el próximo Motor Show de Ginebra 2010 y competirá en las 24 Horas de Nürbrurgring 2010, que tendrán lugar el 15 y 16 de Mayo de este mismo año.
La intención de participar en la carrera para este modelo, no es otra que la de contar con un banco de pruebas y, poder explorar para el futuro la tecnología que se puede aplicar en los deportivos de calle de la marca.
Tal vez muchos piensen que la empresa alemana Porsche es nueva en la producción de autos híbridos, pero nada masss lejos de la realidad. En 1900, Ferdinand Porsche desarrolló el Lohner Porsche, considerado como el primer vehículo híbrido de la historia. ¡Si el primero!
Sin remontarnos tan lejos, hace tres años ya vimos el Porsche Cayenne hybrid y ahora la marca de Zuffenhausen va un paso masss allá, mostrando un híbrido sobre su modelo masss emblemático, el Porsche 911. Sin embargo, no se trata de un híbrido propiamente dicho, masss bien se plantea como la aplicación del tan famoso KERS aplicado la temporada pasada en la Fórmula 1.
El propulsor principal para el 911 GT3 R sigue siendo el motor boxer, situado como es tradición sobre el eje trasero, entrega 480 CV, mientras que para el eje delantero cuenta con dos motores eléctricos que trabajan en conjunto para proporcionar 60 CV suplementarios.
La mayor novedad respecto a los híbridos convencionales a los que estamos acostumbrados es que la energía que se suministra al motor no proviene de baterías eléctricas, sino de un volante de inercia que actúa como generador de energía, al girar a velocidades de hasta 40.000 rpm. Almacenando esta energía cada vez que se realiza una frenada. El sistema conocido de recuperación de la energía cinética creada por la frenada del auto.
La energía almacenada en el generador que es este volante de inercia es trasladada hasta los motores eléctricos en momentos puntuales de máxima necesidad de potencia, proporcionando ese extra de potencia durante un intervalo limitado de 6 a 8 segundos por cada carga completa.
Es así que esta potencia extra no sólo está orientada a conseguir mayores prestaciones durante un instante, sino que también puede servir para ahorrar combustible (y permitir menos paradas en boxes). Porsche no se podía quedar atrás en la implementación de nuevas tecnologías y, estos resultados para el 911 GT3 R los veremos en el circuito Nordscheleife, dentro de tres meses.
Publicado por:
Emilio R. Covelo
La intención de participar en la carrera para este modelo, no es otra que la de contar con un banco de pruebas y, poder explorar para el futuro la tecnología que se puede aplicar en los deportivos de calle de la marca.
Tal vez muchos piensen que la empresa alemana Porsche es nueva en la producción de autos híbridos, pero nada masss lejos de la realidad. En 1900, Ferdinand Porsche desarrolló el Lohner Porsche, considerado como el primer vehículo híbrido de la historia. ¡Si el primero!
Sin remontarnos tan lejos, hace tres años ya vimos el Porsche Cayenne hybrid y ahora la marca de Zuffenhausen va un paso masss allá, mostrando un híbrido sobre su modelo masss emblemático, el Porsche 911. Sin embargo, no se trata de un híbrido propiamente dicho, masss bien se plantea como la aplicación del tan famoso KERS aplicado la temporada pasada en la Fórmula 1.
El propulsor principal para el 911 GT3 R sigue siendo el motor boxer, situado como es tradición sobre el eje trasero, entrega 480 CV, mientras que para el eje delantero cuenta con dos motores eléctricos que trabajan en conjunto para proporcionar 60 CV suplementarios.
La mayor novedad respecto a los híbridos convencionales a los que estamos acostumbrados es que la energía que se suministra al motor no proviene de baterías eléctricas, sino de un volante de inercia que actúa como generador de energía, al girar a velocidades de hasta 40.000 rpm. Almacenando esta energía cada vez que se realiza una frenada. El sistema conocido de recuperación de la energía cinética creada por la frenada del auto.
La energía almacenada en el generador que es este volante de inercia es trasladada hasta los motores eléctricos en momentos puntuales de máxima necesidad de potencia, proporcionando ese extra de potencia durante un intervalo limitado de 6 a 8 segundos por cada carga completa.
Es así que esta potencia extra no sólo está orientada a conseguir mayores prestaciones durante un instante, sino que también puede servir para ahorrar combustible (y permitir menos paradas en boxes). Porsche no se podía quedar atrás en la implementación de nuevas tecnologías y, estos resultados para el 911 GT3 R los veremos en el circuito Nordscheleife, dentro de tres meses.
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Emilio R. Covelo
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